En temporadas calurosas y con lluvia poco frecuente, los agricultores requieren de un sistema de riego de cultivos. Ya sea mediante agua subterránea o superficial se bombea directamente a las granjas para hidratar las plantas sedientas.
La investigación ha respaldado numerosas estrategias de aplicación eficaces, pero cada agricultor tiene sus propias preferencias y presupuestos. Te explicamos a continuación algunos errores frecuentes y vías efectivas para impulsar la hidratación agrícola.
Error N° 1: exceso de riego
Cuando el suelo se riega en exceso, se le da demasiada agua, lo que afecta la composición del suelo. Debido al contenido de sal en el agua, cuando el suelo se riega en exceso y el agua finalmente se evapora, los depósitos de sal se acumulan en la superficie del suelo.
Esto altera la composición del suelo y suceden algunas cosas:
- El exceso de agua en el suelo comienza a llenar los poros de aire del suelo.
- La temperatura del suelo se reduce y su acidez y nitrógeno aumentan.
- Los nutrientes en el suelo fluyen al subsuelo.
Estos cambios en la composición del suelo obstaculizan directamente el crecimiento de cualquier planta:
- Las plantas tendrán raíces más cortas.
- El aumento de los niveles de acidez, sal y nitrógeno significa que las plantas no obtendrán los nutrientes que necesitan.
- Es posible que el suelo no sea lo suficientemente fuerte para sostener plantas en crecimiento.
Un suelo sano es necesario para una agricultura productiva. El riego excesivo obstaculiza dicha productividad. Además, demasiada agua tiene menos impacto visual que muy poca, pero desperdicia tierra y fertilizantes.
Elimina el riego profundo de cultivos de raíces poco profundas como cebollas o frijoles. Los riegos frecuentes y ligeros ayudan a mantener el agua y los nutrientes móviles en la zona de las raíces, donde las plantas pueden usarlos.
Error N° 2: riego poco preciso
Especialmente en áreas del país donde el riego de cultivos es necesario e importante, los sistemas de riego de precisión son necesarios. Mediante la aplicación de un sistema de riego de cultivos efectivo, los productores pueden:
- Gestionar otros recursos valiosos con mayor eficacia.
- Producir cultivos más saludables y mayores rendimientos.
- Marcar la diferencia en el manejo de nutrientes y enfermedades.
Muchos productores que actualmente utilizan sistemas de riego optan por aspersores que giran en torno a áreas específicas de suelo seco en lugar del campo más grande como un todo.
Si el contenido de humedad de un suelo es óptimo para el crecimiento de las plantas, estas pueden absorber fácilmente el agua del suelo. Gran parte del agua permanece como una película delgada. Se disuelven las sales y constituye la solución del suelo, un medio importante para suministrar nutrientes a las plantas en crecimiento.
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